miércoles, 30 de julio de 2008


Sólo consta de una escalera apoyada en un tejado. Una escalera de madera vieja, pero que aún conserva un ligero olor a carpintería. La encontré por casualidad, un día cualquiera, a mi lado.

Arriba, descubrí que no hace falta acariciar un reflejo para tocar la Luna.

Es sólo un tejado, el resto eres tú.


Ahora sé que nunca podré bajarme de él.


Sintiendo,


a dreamer.


Pd: Foto del árbol de Bolonia. Fui hace unos diez u once años por primera vez y lo único de lo que me acuerdo es de ese gran árbol. Recuerdo cuánto brillaba, cómo el sol se colaba entre sus hojas... Tenemos una relación especial desde entonces.